La prevención es la clave
José es un ejemplo. 46 años, hace ejercicio diariamente, tiene tiempo para sus hijos, duerme temprano y se levanta temprano, no fuma, no toma, no baila pegado, come saludable, y sobretodo, vino hoy a chequearse para estar seguro que todo está bien. Él sabe que hay enfermedades heredadas que escapan a la influencia personal y a las buenas decisiones. Sin embargo, todo salió perfecto.
Hay casos que esperan el “bombazo”, el “pencazo”, el infarto, para comenzar a chequearse. No amigo, es antes. Las cosas tienen mejor evolución si se revisan con tiempo.
Por otro lado, lo que usted hace diariamente, lo cotidiano, define la forma en la que llegará a su vejez. La calidad de vida que tendrá. Hay personas que todavía creen que todo es al azar, que las cosas les suceden por cosas del destino, y muchas lo estamos forjando con lo que decidimos todos los días. La expectativa de vida de nuestra población va a mejorar cuando entendamos este concepto tan sencillo. ¿O usted lleva su carro al mecánico cuando ya está hechando fuego el motor?