El amor hacia mi esposa

Hoy cumple 38 años mi esposa, y coincide con 32 semanas de gestación de Gabrielito.
Conocí a mi esposa cuando tenía 18 años. Ya tenemos 20 años juntos. Yo no puedo decir que hemos pasado situaciones difíciles de pareja, al contrario, todo ha sido una bendición. Siempre nos hemos llevado bien, nos hemos cultivado mutuamente. Yo estoy pendiente de ella, y ella de mi. Es algo recíproco. Nunca hemos escondido nuestros sentimientos. Siempre con la verdad y sin andar escatimando en expresiones de cariño cuando estas salen de forma natural.

Hoy me levanté temprano, la abracé, y le pregunté si la he hecho feliz todos estos años, y me dice: -“He sido muy feliz”-. Creo que nosotros los hombres, los esposos, los que queremos romper esquemas, los que queremos guiarnos por Dios, los que queremos hacer bien las cosas; estamos llamados a buscar la felicidad de nuestras esposas. Debemos ejercer el rol y el papel de buenos esposos: Protectores, proveedores, hombres que resuelven problemas, que toman el “toro por los cuernos”, hombres con capacidad de decisión, valientes, que saben lo que tienen que hacer y que lo hacen. Hombres que se cuidan, que no tienen vicios, que priorizan su familia por encima de todo, hombres fieles, detallistas, que no dejan escapar la oportunidad de demostrarle a su esposa el amor que se tiene por ella.

Algunos dicen por ahí: -“A la mujer, ni todo el amor, ni todo el dinero”- Yo digo lo contrario, a la esposa se le debe dar todo. Y eso no incluye solamente cosas materiales, incluye momentos, recuerdos, besos románticos, tiempo de calidad (sin el celular), salidas fortuitas por ahí, situaciones que puedan recordar cuando sean viejos.

Hoy cumpleaños mi esposa, y estoy contento de hacerla feliz